12 diciembre 2011

Capra pyrenaica victoriae

La tarde no prometía gran cosa cuando salí de casa: mucho frío, bastante niebla, ... pero aún así me animé a subir a Batuecas. Allí, en la colonia de buitre leonado había bastante movimiento. Los buitres entraban continuamente a sus posaderos.

Un poco más arriba,  o bastante más arriba (en la Peña de Francia) me encontré con esta agradable sorpresa: un par de rebaños de cabras montesas, que ramoneaban todo lo que se les ponía a mano: desde la curtida hierba que tapiza algunas partes del sotobosque, hasta los duros brezos. Estaban a lo suyo, así que no tuve ni que bajarme del vehículo para hacer las fotos y grabarlas en video.

Muchas noches, bajando el puerto de La Alberca a Las Mestas, me he topado gratamente con ejemplares solitarios que, sobre todo en verano, abandonan sus reservorios de alta montaña para bajar a comer pastos frescos del valle y para beber en el río Batuecas.

Por estas fechas en las que nos encontramos, las cabras (que son animales sociales) se reunen en grandes rebaños, constituidos por machos adultos, hembras con sus crías o adolescentes de ambos sexos, correspondiendo con la época de celo de la especie (noviembre y diciembre).

Los grandes machos combaten entre sí por el favor de las hembras empleando sus espectaculares cornamentas como ariete de combate. El sonido que emana de los violentos choques producidos con las defensas de estos titanes resuena en la sierra en los días que no hace aire.




Aquí dejo el video que he realizado con algunos de los momentos que he captado hoy:



Aquí pongo mi primera grabación de cabras (hace un par de años), también en la Peña de Francia.

0 comentarios: